La Fuente de la Vizcaína y el LP PR 5

Hola:

El pasado día 31 de mayo fui a caminar por la Fuente de la Vizcaína, una fuente situada a unos 2050 metros de altitud en los altos del municipio de Puntallana. La Fuente escapó de milagro de la construcción de la carretera del Roque y muestra todavía claros signos del pasado de una intensa actividad pastoril y descanso de arrieros y caminantes.

En esta fuente se inicia el PR LP 5, un camino radial que termina en La Galga. Mi intención era caminarlo hasta el PR LP 3.2 y desde allí hasta el Refugio de Puntallana. Luego, volver al punto de inicio.

El camino desde el principio mostraba indicios de poco mantenimiento, deterioro y olvido. Me dio la impresión de que no se había limpiado desde que se marcara a finales de los años 90. Cuando cogí la loma que me llevaría al 3.2 era tal la barrera vegetal que no sólo impedía ver el camino, sino el propio paso. Me detuve, perdón, fui detenido por una densa masa de codesos y helechos a una altura de 1850 metros aproximadamente sin que pudiera alcanzar el 3.2. Di media vuelta y reconozco que me costó volver por la espesa vegetación, ahora cuesta arriba.

Cuando volví a casa me detuve a analizar qué había pasado. Según el mapa de senderos de 1998 el camino que había recorrido estaba en proyecto. Según la reedición y revisión de 2005 el camino estaba perfectamente. Y en el terreno había marcas y el camino se podía seguir hasta unos 1900 o 1950 metros de altura. ¿Qué había pasado? Pues muy simple, a mi entender:

A finales de los 90 se suponía que iban a terminar el camino después de publicar el mapa. Sin embargo llegó la edición de 2005 y no se les ocurrió revisar la situación del camino, ni siquiera de caminarlo. Y con las mismas publicaron el trazado en el mapa. Esto, si es que como me he imaginado, es una clara demostración de irresponsabilidad y dejadez.

Y yo excursionista, que estaba dispuesto a pasar un día agradable por un sendero marcado en el mapa, por un lugar fascinante desde mi punto de vista, he tenido un día desgraciado, de arañazos y lucha contra la maleza, gracias a unos desgraciados de los cuales me he acordado en todo momento, y todavía me acuerdo.

Si tienen pensado hacer ese camino, por favor, no lo intenten. Y a los responsables de los senderos de La Palma: recuperen el camino cuanto antes o impidan su uso a través de las posibles rutas de acceso. Gracias.